1010 Bardenas

Aunque el pronóstico del tiempo no era nada bueno, como ya teniamos las mochilas preparadas y el alojamiento reservado en las Cuevas de Valtierra, decidimos seguir adelante con el calendario.

Y cual es nuestra sorpresa que el tiempo por aquellas tierras nos da una tregua para poder disfrutar del extraño paisaje de las Bardenas Blancas.

El sabado a la mañana algunos intentan hacer una travesía por Olite que al final desisten por el tiempo, pasando el día en el pueblo y el castillo.

El domingo salimos desde Castildetierra para hacer el Castillo de Peñaflor, pero las lluvias de dias anteriores han llenado de agua los cauces de algunos barrancos que normalmente estan secos y no encontramos la forma de vadear el primero de ellos con agua hasta la rodilla.

Como no hay ganas de quitarse las botas y pasar descalzos, cambiamos los planes y decidimos tirar al Cabezo de las Cortinas, una colina no muy alta situada en el centro de las Bardenas.

Esquivando varios barrancos y buscando el mejor paso por estos laberintos de tierras rojizas nos plantamos en la cima sin mayor dificultad, picamos algo y tiramos para abajo por la otra vertiente.

Como a algunos esto nos parece poco, cogemos los coches y nos aproximamos hasta la Cañada Real desde donde salimos para subir al Rallón. Monte mas bonito por sus vistas que el anterior y que nos muestra todo un paisaje de crestas y barrancos de tierra arcillosa.

Al día siguiente, decidimos tirar para Piskerra. Como amanece chispeando, alguno se acobarda y decide irse de turismo a Tudela con el pobre Fernando, que resulta lesionado en la dura jornada anterior. No sin antes dejarnos a los que nos vamos al monte a toda la prole, bueno los pequeñajos se quedan con ellos.


Los niños disfrutaron de lo lindo en la bonita travesía que hicimos, atravesando barrancos y subiendo y bajando crestas durante todo el día, teniendo que subir a rescatar a mas de uno por subir mas arriba de lo que debían.

Travesía bonita por el paisaje mas extraño de las Bardenas que subiendo por el paso de los Ciervos nos deja en la meseta superior donde podemos atacar la cima del Piskerra. Hermosas vistas desde arriba, comida al solete y para abajo.

El ultimo día lo pasamos en el Parque Sendaviva, donde no solo los peques disfrutaron de lo lindo sino tambien los mayores bajando por el boslhey, por el largo tobogán con neumaticos o de los 650 mts de tirolina que a alguno le daba mas que respeto.



Fin de semana completo para todos.